En un artículo reciente sobre el hormigón, hablábamos del deterioro que le podían causar determinados ataques químicos y cómo repararlo. En esta ocasión, seguiremos teniendo al hormigón como protagonista pero para comentar la norma UNE-EN 1504-6 de productos y sistemas para la protección y reparación de estructuras de hormigón, que en su parte 6 se centra en el anclaje de armaduras de acero.
A estas alturas, que el hormigón armado tiene cierta vulnerabilidad es incuestionable. Mayor de la que se creía.
La contaminación de nuestro medio ambiente urbano e industrial que destruye la capa pasivante del acero de sus armaduras es uno de los motivos. Otro, la estructura porosa del propio hormigón que permite que ciertos elementos penetren y corroan sus armaduras.
Finalmente, los costes económicos y medioambientales que suponen la demolición, eliminación y reconstrucción de las estructuras de hormigón existentes justifican ampliamente la orientación actual hacia la rehabilitación de las construcciones, en general, y de las estructuras en particular, enfocadas a su durabilidad.
Anclaje de armaduras y barras
Es el conjunto de productos y sistemas para el anclaje de armaduras de acero en el hormigón, basado en el principio 4 y los métodos que se detallan a continuación:
Principio 4. Refuerzo estructural
Antes de entrar en harina en el tema del anclaje de armaduras, es preciso recordar que desde el 1 de enero de 2009, es de obligado cumplimiento en toda la Unión Europea la Norma UNE-EN 1504. Esta norma especifica los requisitos para la identificación, comportamiento y seguridad de los productos y sistemas a utilizar para la reparación y protección estructural y no estructural del hormigón. Con ella, lo que se pretende es conciliar las normativas locales existentes en la UE; asignar unos requisitos de calidad mínimos de obligado cumplimiento que garanticen la seguridad de los usuarios; y garantizar el libre comercio de productos en Europa.
En cuanto al Principio nº 4 (SS) de la parte 6 de la norma sobre Refuerzo Estructural, se realiza cuando es necesario un incremento o restauración de la capacidad portante de un elemento de la estructura de hormigón. Es decir, cuando es imprescindible el refuerzo de estructuras.
Existen varios métodos para lograr el refuerzo necesario, como adición o reemplazo de barras de armadura embebidas o externas, o la adición de anclaje de armaduras en agujeros perforados o taladros.
Para determinar el método a utilizar se tendrán presentes las fases del proceso de reparación del hormigón: inspección, diagnosis, determinación del objeto de la reparación y selección de los métodos apropiados para la reparación.
Selección del producto
Podemos utilizar tres tipos de productos para el anclaje de barras según:
- Su composición
- Sus características de comportamiento
- El método de reparación

Según su composición
- Morteros y hormigones hidráulicos (CC)
A base de un conglomerante hidráulico y mezclado con áridos calibrados y que pueden incluir aditivos y adiciones. Fraguan por medio de una reacción de hidratación una vez mezclados con agua.
- Morteros y hormigones de cemento hidráulico polimerizados (PCC)
Son los modificados con adiciones poliméricas en cantidad suficiente para proporcionarles propiedades específicas.
- Morteros y hormigones polimerizados (PC)
A base de un conglomerante polimérico y áridos. Fraguan por medio de una reacción de polimerización.
- Según sus características de comportamiento
La norma exige que los productos de anclaje de armaduras y barras cumplan unos determinados requisitos relativos a sus prestaciones. Todos los fabricantes deben cumplir con los requisitos de la Tabla 3 de la norma 1504–6, sometiendo los productos a ensayos iniciales de prestaciones.
Aplicación
El anclaje de una barra en una estructura de hormigón se puede realizar de las siguientes formas:
- Mediante vertido del mortero
- Inyección
- Pistola
Antes de la elección del producto, del trabajo que vaya a realizarse y de su viabilidad, es necesario llevar a cabo una comprobación del estado del hormigón al cual efectuaremos el anclaje. Algunos de los puntos que deben comprobarse son los siguientes:
- Situación actual que incluya posibles defectos ocultos
- Diseño del proyecto
- Ambiente exterior (contaminación, humedad, niebla salina, salto higrotérmico…)
- Condiciones durante la construcción (sol, lluvias, estabilidad del terreno, materiales empleados…)
- Historia de la estructura
- Condiciones de uso (carga en particular)
- Cargas futuras de uso
Para el éxito completo de los anclajes a ejecutar, es imprescindible realizar una preparación del soporte adecuada según la elección de producto que vayamos a utilizar.
En soportes de origen mineral como el hormigón y la piedra, los soportes deben ser firmes, rugosos y compactos, y estar limpios, sin partículas sueltas, aceites, grasas, etc.
Para productos en base cemento
Previamente se humedecerán a saturación, eliminando el agua sobrante antes del relleno, realizando la aplicación cuando la superficie presente un aspecto mate. Los elementos metálicos, estarán limpios y sin óxido, y la temperatura del soporte deberá ser superior a 5ºC.
Para productos en base resinas
Los elementos metálicos, estarán limpios y sin óxido y la resistencia a tracción de la superficie será >1,5 N/mm2 .
La humedad residual del soporte no será superior al 5%, y la temperatura del soporte deberá ser superior a 8ºC.
Puntos que deben tenerse en cuenta
Productos CC, base cemento | Productos PC, resinas sintéticas | |
Tolerancia a la humedad del soporte | Alta | Baja |
Longitud de anclaje | Mayor | Menor |
Adherencia química | Baja | Alta |
Recomendación sobre el uso de morteros
Por otra parte, desde ANFAPA se recomienda siempre el uso de morteros industriales cuyo control mediante el marcado CE, distribución y homogeneidad garantizan las características necesarias para una ejecución de alta calidad de los muros de fábrica vista. Estos morteros son los únicos que aseguran una uniformidad en la textura, el tono y el color a lo largo de la obra, lo cual resulta imposible de conseguir con los morteros in situ.
ANFAPA incide en que se deben desterrar de las obras los morteros realizados in situ, en cuya elaboración intervienen varias manos, diferentes maneras de hacer y dosificaciones aleatorias que finalmente traen como resultados acabados imperfectos, tonalidades y colores dispares y múltiples patologías que pueden evitarse fácilmente con el uso de morteros industriales los cuales ofrecen todas las garantías del fabricante que los suministra.
Sobre Anfapa
ANFAPA agrupa, desde 1987, a las empresas pioneras en España en la fabricación y desarrollo de morteros industriales y sistemas de aislamiento térmico por el exterior SATE. Son empresas que aportan ideas, ilusión y mayor capacidad para desarrollar la promoción y divulgación de los productos y sistemas que se fabrican. Además de la participación en los distintos foros técnicos de normalización, ya sean españoles o europeos.
Su objetivo es promover la calidad de los morteros y los sistemas SATE. También promocionar y desarrollar nuevos proyectos de productos y sistemas. Y defender la representación necesaria de sus intereses ante las distintas Administraciones e Instituciones públicas y privadas. ANFAPA alcanza un volumen de negocio de casi 1.430 millones de euros, con 384 almacenes, casi 100 fábricas y cerca de 4.400 empleadas.
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